lunes, 25 de mayo de 2009

Preguntas

Empezaba a caer la noche cuando llegamos a lo que parecía un barrio residencial, con calles iguales en las que se alineaban casas también iguales, con pequeños jardines y cercas blancas. Parecía que la revuelta no había tenido apenas eco por aquí y la estampa era casi normal, de no ser por un pequeño detalle: el lugar tenía pinta de estar totalmente desierto. No se veía luz en las casas, ni se escuchaban las voces y los ruidos de sus habitantes, pero tampoco oíamos los gemidos de los muertos, el silencio era sepulcral, apenas roto por nuestros pasos cansados y el sonido de la lluvia. No habíamos abierto la boca desde la huida de los militares, simplemente nos habíamos limitado a caminar, abatidos, de nuevo hacia la ciudad. ¿Qué otra cosa podíamos hacer? Ahora, sin embargo, teníamos que preocuparnos de algo mucho más inmediato: estábamos helados, teníamos hambre, y necesitábamos pasar la noche en algún lugar resguardado. Las casitas, vistas en la penumbra, no resultaban demasiado acogedoras.

"Ya sé que puede ser peligroso" dijo Sam. "Pero no podemos encontrar nada mejor por el momento... Dentro de poco será completamente de noche. Deberíamos probar en alguna de las casas, quizá incluso haya suministro eléctrico". Sam tenía razón. Miramos a nuestro alrededor, buscando señales que nos indicasen cuál era el refugio más apropiado. Al final nos decidimos por la casa más cercana, que desde fuera, como todas, parecía vacía. La puerta de entrada estaba entreabierta. "¿Eso es buena o mala señal?" pregunté, en voz baja. Los demás se encogieron de hombros, pero prepararon sus armas. Abrimos del todo y entramos en el vestíbulo.

Isaac pulsó el interruptor de la luz, y una lámpara parpadeó unos instantes, luego se apagó. No es que confiásemos en tener electricidad, así que saqué una linterna de la mochila e iluminé el pasillo. Aseguramos la puerta y cerramos la entrada posterior. La casa parecía vacía, no se oía nada y no había signos de actividad. Las cosas estaban a medio recoger, había algunas prendas de ropa sobre una silla y platos en el fregadero de la cocina. Daba la impresión de que los habitantes de la casa la había abandonado a toda prisa, probablemente justo al principio de todo este asunto. El polvo empezaba a acumularse en el suelo y sobre los muebles. En la nevera había comida, algunas cosas estaban ya estropeadas. Sam empezó a sacar fruta y leche. "Sería una lástima dejar que todo esto se echara a perder" dijo, relamiéndose los labios.

Me dirigí hacia donde estaba Mel. Tenía hambre, pero podía esperar unos momentos y necesitaba algunas respuestas. "Sabían que no estábamos infectados, si no, no hubiesen avisado antes de disparar" le dije. "¿Se puede saber a qué está jugando el ejército?" Mel negó con la cabeza, perdiendo por momentos la serenidad que le caracterizaba. "No... no lo sé" dijo. "¡No lo sé, maldita sea! ¡Esto no es lo que tenían que hacer!" Isaac se acercó a nosotros. "¿Qué quieres decir con eso?" preguntó. Mel nos miró unos momentos, parecía a punto de derrumbarse, pero de pronto recuperó la serenidad otra vez.

"Cuando nos enviaron aquí, se suponía que teníamos que evacuar a la población civil no infectada" empezó. "Es lo que establece el protocolo del Plan Nacional de Contingencia contra Amenazas Biológicas. La cuarentena, cerrar la ciudad... todo forma parte del protocolo. Es el que se sigue con el nivel máximo de alerta. Pero de pronto, nos abandonaron aquí dentro, a nuestra suerte. Eso sólo podía significar una cosa y era que iban a... neutralizar el foco de la infección, es decir, la ciudad. Que iban a volarnos por los aires. Pero han pasado dos días y no lo han hecho, y tampoco nos han dejado salir. No sé qué cojones pretenden."

Nos miramos, preocupados. Aquello sin duda tenía mala pinta, aunque parecía que no iban a hacernos desaparecer, tampoco iba a ser fácil salir de la ciudad. Me pregunté cuál sería nuestro próximo movimiento, si es que había alguno, pero por el momento era más importante asegurar nuestra supervivencia más inmediata. "¿Qué os parece si buscamos algo de ropa seca?" dije. "No creo que a los propietarios les importe... después de que Sam haya arrasado con su nevera". Sam rió, pero enseguida saltó de su silla dispuesto a quitarse de encima su uniforme empapado. Subimos al piso de arriba con las armas preparadas, ya que todavía no lo habíamos explorado. Había un pasillo largo con puertas a los dos lados, la mayoría de ellas abiertas. Sólo una, la primera, estaba cerrada. Escuchamos un golpe, y luego jadeos, procedentes del interior. Isaac se acercó. "¿Hola?" dijo, junto a la puerta. Como respuesta, oímos más golpes y un gemido, como si un animal estuviera atrapado en el interior. Sólo que todos sabíamos que no se trataba de ningún animal.

9 comentarios:

  1. Hola! He de deciros que me encanta vuestro blog, pero parece que estemos en época de sequia, porque en este pasado mes (mayo) solo habeis publicado 4 entradas, mientras que en abril 10! Vale que ahora viene la época de examenes, pero podriais hacer un pequeño esfuerzo, aunque sea semanal, ya que tambien tenemos derecho a dejar de vez en cuando los estudios y deleitarnos con alguna nueva entrada, y más ahora con "eso" detrás la puerta... A ver cuando decis lo que hay ahí detrás, que ya no me quedan uñas!
    Besos y seguid así

    Vanessa_K

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  2. Vanessa, chica, que tienen derecho a tener vida, No cobran nada, demos gracias de que nos dejen deleitarnos con la historia publicándola en Internet, que no están obligados...

    Si estamos sufriendo nosotros, imagínate lo que deben estar pasando los personajes, ahí esperando en pausa sin saber lo que va a ocurrir en el siguiente párrafo, xD.

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  3. Créete Vanessa que a nosotros también nos gustaría poder publicar más a menudo, pero desafortunadamente es mala época para las actividades extra-académicas... piénsalo de otra forma: así te distraemos menos y estudias más!

    Pronto descubriremos qué hay detrás de la puerta... ¿vosotros qué creéis que hay? Vamos, se admiten propuestas!

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  4. Seguro que es alguna consola que se dejaron encendida xD

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  5. ¿Si apenas había electricidad, como podría funcionar una consola? ¿A pilas? je je Yo me inclino a pensar que puede ser una pareja haciendo... bueno, eso.

    Vanessa_K

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  6. Era broma, Vanessa, cariño.

    Me inclino por algún infectado atado a algo para inmovilizarle...

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  7. uffffff esto esta super bueno, recien hoy descubri este blog y me lo lei todo en un par de horas, pero hoy es 9 de julio, escribe mas seguido para que esto no se enfrie, salu2

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  8. Hola Hunter, me alegro de que el blog te guste. Hemos estado bastante liados en el último mes con los exámenes, pero esperamos volver a actualizar dentro de poco.
    Espero volver a verte por aquí, un saludo ^^

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